LA INVASIÓN DE LOS ULTRACUERPOS

Esta mañana, al salir de casa, me he topado con dos chavales paseando a un perro. Los dos iban mirando el móvil, sin hablar entre ellos. No sonreían, ni siquiera levantaban la mirada para ver qué hacía o dejaba de hacer el perro. Después, en la parada del bus, había dos señoras y una chica joven. Las tres estaban mirando sus móviles, fijamente, sin pestañear. He dicho buenos días y he creído escuchar un murmullo. Cuando ha llegado el bus he sido el primero en subir y he contado cuatro personas. Un anciano, dos estudiantes de instituto y una mujer de mediana edad. Estos tres últimos con la vista clavada en la pantalla de sus teléfonos móviles. Aunque hubo un tiempo en que me encontraba algún que otro pasajero leyendo un libro, esta vez y por un momento, me ha hecho gracia cuando he recordado uno de los capítulos de Black Mirror. Sin embargo, cuando me he girado de nuevo hacia el anciano, que era el único sin teléfono móvil, éste me ha mirado con el ceño fruncido y entonces me ha venido a la mente otra cosa, la invasión de los ultracuerpos. Me ha dado miedo. He sacado el libro que actualmente estoy leyendo, "Marvel, crónica de una época" de Rafael Marín, pero me ha sido difícil concentrarme durante todo el trayecto.

POR 13 RAZONES

1- Porque hay personas que están pidiendo ayuda a gritos.
2- Porque hay personas que están pidiendo ayuda en silencio.
3- Porque la empatía del ser humano está en declive y está en nuestro poder enseñar a las nuevas generaciones a que eso no ocurra.
4- Porque volcamos en los más jóvenes ideas tan contradictorias como nuestros sueños y esperanzas, así como nuestras más terribles pesadillas, fracasos e inseguridades.
5- Porque las palabras hacen daño, incluso cuando no nos damos cuenta.
6- Porque un abrazo o el más simple gesto se pueden convertir en la mayor de las alegrías.
7- Porque no estamos solos y podemos pedir ayuda para pelear contra aquellos que nos hacen daño.
8- Porque no siempre somos fuertes, o valientes o unos héroes o heroínas.
9- Porque llorar no es símbolo de debilidad.
10- Porque tenemos que aprender a querernos por lo que somos y amamos, no por lo que a otros les gustaría que hiciéramos con nuestra vida.
11- Porque todos cometemos errores y tropezamos en las mismas piedras, eso no te convierte en una mala persona, sólo en un ser humano.
12- Porque una persona no es un avatar, un emoticono o una red social, es alguien con familia, amigos, sueños y esperanzas.
13- Porque todos tenemos nuestra historia y es nuestra y de nadie más, y eso nos hace especiales a todos y cada uno de nosotros.

Trece razones, trece razones por las que deberías ver esa serie, leer el libro y convertir ambos en visionado y lectura obligatoria en los institutos.





ESTE SANT JORDI, "CAMISA DE FUERZA" (de El Torres y Guillermo Sanna)

No os lo había dicho, no al menos por aquí pero sí por las redes sociales, y es que estoy intentando escribir mi primer libro. No voy a entrar en lo jodidamente difícil que me está resultando pero sí puedo practicar aquí un ejercicio de relato corto. A ver qué os parece: "Van El Torres y Guillermo Sanna y lo petan". Sé que es una mezcla de opinión y visión del futuro pero tenéis que entenderme: me siento aquí porque Camisa de Fuerza me ha dejado en shock y luego tengo que intentar plasmar eso aquí. No es nada fácil, así que de alguna manera tenía que empezar. 

Tranquil@s que no habrá spoilers pero pillo el tebeo, lo abro y ya me quedo to rayao de que sea en blanco y negro con algunas páginas en rojo. No conocía nada del trabajo de Guillermo pero después de echar el vistazo inicial me deja a cuadros. El vistazo inicial ya sabéis en que consiste ¿no? Coges el tebeo miras la portada, le das la vuelta y miras la contraportada. A continuación lo abres y dejas pasar un porrón de páginas de golpe. Acto seguido te detienes, a riesgo de spoiler, en alguna escena o página porque te ha llamado la atención. Acercas la nariz, inspiras y te deleitas con el olor del tebeo. Eso lo hacemos todos, no me vengáis con tonterías. 

Luego lo lees, del tirón. Lo cierras y a continuación levantas la cabeza y se te queda la mirada clavada en el infinito. Ya véis que como escritor no voy muy bien pero ¿eh que me entendéis? Después cuando te recuperas vuelves a mirar la portada y dices "¡Hostia puta qué pasada de tebeo!" Sé que no es muy literario, pero creo que resume a la perfección lo que me ha parecido este cómic. Y es que es así, El Torres lo ha vuelto a hacer. Si bien es cierto que hasta la fecha El bosque de los suicidas era uno de mis tebeos favoritos os tengo que anunciar que Camisa de fuerza ha superado todas mis expectativas y con creces. No sólo como lector, que va, sino también como escritor de cómics. Es una putada, hablando claro, porque lees esto y te quedas en plan "¿y qué cojones he estado escribiendo yo hasta la fecha?". La narrativa es brutal y el desarrollo de los personajes es... bueno, ni qué decir tiene que ni lo necesita porque la presentación de cada uno es más que suficiente, de modo que puede pasar a darnos toda la acción que queramos y más sin necesidad de adentrarnos en la psique de cada uno. De eso ya se encarga la propia historia. El trabajo que hay detrás se ve que es descomunal, y no sólo eso, sino que os digo yo que se nota a leguas que El Torres se lo ha pasado teta escribiéndolo. Ni mucho menos me lo ha dicho, pero no me equivoco. Para nada.

Luego está el trabajo de Guillermo, que me perdone pero era la primera vez que veía algo suyo. Os prometo que aquí ya tiene un fan. Uno vuelve a releer un tebeo por muchos motivos, y uno de ellos es por el dibujo. En este caso sólo me ha faltado ponerme un babero y relamerme cosa mala cada vez que pasaba sus páginas. Después, y que El Torres me perdone, he pensado "¿Qué hace este tío que no está trabajando más?" Y mientras me informaba para escribir este post leo, sin sorpresa alguna pero con una gran recozijo, de que Sanna ha comenzado a currar para Marvel recientemente. Se lo merece. ¡Ole! Eso sí, desde aquí, si me lees, no dejes de currar con Juan, podéis seguir haciendo maravillas.

Ahora bien, antes de terminar os quiero dejar una cosa bien clara. Os puede parecer un post excesivo, un post muy fuerte y muy contundente pero nada más lejos de la verdad, cuando un tebeo es bueno de narices hay que difundirlo. Admiro a Juan y su trabajo pero esta vez se ha superado. Sólo dire una cosa más y espero que se os quede grabada porque va a pasar y no va a tardar: este tebeo es de Eisner, recordad lo que os digo, de Eisner, será nominado. Y si no lo es será por tema de normativa o vetetuasaberqué, pero no por qué no esté a la altura. No sé si será premiado, que ojalá, pero ese es el nivel. Jose Ángel Ares, mi compañero en Rosa y Javier, sabe que no me suelo equivocar en estas cosas. 

¿Queréis regalar un tebeo de Eisner para Sant Jordi? No busquéis más. 



ESTE SANT JORDI, COBURN (de Pablo García Naranjo)

Mi padre no leía mucho y, en cierto modo, no es que tuviera mucho tiempo para ello. Sin embargo siempre guardaba en su mesita de noche un par de libros. Ahora bien, no estamos hablando de libros de tapa dura o de grandes bestsellers del momento, que va, se trataba de las pequeñas ediciones de bolsillo que por entonces publicaba Bruguera y que abarcaban todo tipo de géneros. Los conseguía de segunda mano y cada vez que podía se los iba leyendo poco a poco. Es por ello que cuando ví el libro de Pablo García Naranjo por primera vez en la estantería no pude evitar evocar todos esos recuerdos. 

Coburn es un libro necesario, un libro que rescata un formato y un género cosa mala, no sólo para el lector habitual de novela negra sino también para todos aquellos que se quieran iniciar en el género o que su tiempo les permita únicamente echar mano de su mesita de noche de tanto en cuanto. Eso sí, no nos engañemos, un lector no vive únicamente del formato aunque le resulte necesario en determinados aspectos de su vida. Tiene que haber más, mucho más, y lo hay. Pablo amartillea cada tecla con una fuerza que es capaz de captar el lector, con frases cortas y bastante explícitas que permiten que la acción se convierta en un puñetero espectáculo en 3D ante tus narices. Algo que me sorprendió mucho ya que únicamente estaba acostumbrado a sus relatos de fantasía heroíca.

Cierto es que yo no soy mi padre y poco me he adentrado en el género negro ya que no es uno de mis favoritos pero por eso precisamente es por lo que os estoy recomendando esta lectura, porque ha sido capaz de llegar a alguien que ni es un experto en el tema ni conoce todo el catálogo del mismo habido y por haber. Simple y llanamente me ha gustado y me ha gustado mucho, y que a mí me haya gustado ya es. Sólo hay que ver a su protagonista, Coburn, que es la primera vez que leo sobre él pero pronto me doy cuenta después de unas cuantas páginas de que ya lo conozco: no es Deniro, no es Stallone, es Charles Bronson, es Fred MacMurray en Perdición, es el tipo duro al que no hay que tocarle los huevos porque sino ya sabes lo que va a pasar a continuación. Pero eso no es un spoiler, no al menos cuando te deleitas en cada capítulo y el viaje hasta la última página (la 216) es una gozada.

Ahora viene la sorpresa, para los que no lo sepáis Coburn se publicó en 2015. ¿Y qué hago yo recomendándolo para Sant Jordi de 2017? Bueno, es tan simple como que todo este tiempo el blog ha estado muer...hivernando. Sin embargo este libro es como su protagonista, el propio Coburn, que nunca pasan de moda, no mientras haya autores como Pablo, que los comprenda y los resucite todas las veces que hagan falta. 

Ah, y una cosa más, que me he enterado que está terminando de publicar la segunda parte. Así que toca leer esta que sino luego se os van acumulando las lecturas.

PD: Mañana os recomendaré un tebeazo que no os podéis perder. 

   - Seguir leyendo: http://www.libertaddigital.com/cultura/cine/2014-07-17/buscamos-las-mejores-peliculas-de-cine-negro-12e6524056/ en

 


The man of tomorrow - Templates Novo Blogger 2008