Hoy, después de 10 años, termina mi andadura en el cine con Harry Potter. Recuerdo cuando fui a ver la primera película, era para llevar a mi sobrino (el mediano) que hoy tiene ya 19 años. Ni me había leído los libros ni nada, sólo sabía que alrededor del estreno había mucha expectación y que la gente se moría de ganas por ver el film. El caso es que la sala estaba repleta de niños, cientos, literalmente y que cuando empezó la peli se hizo el silencio. Curiosamente apenas "molestaron" durante la proyección, aparte de aplaudir de vez en cuando. Así, mi sobrinito y yo salimos encantados. A la semana siguiente fui con mi hermana y con mi sobrino otra vez.
Con Harry Potter redescubrimos esas películas de fantasía que desde los 80 ya no se veían, con su inocencia y un universo que giraba alrededor de la magia donde existían las varitas, los duendes y unas escuelas de magia donde cenabas todos los pasteles que quisieras. De ese modo disfrutamos de nuevo con la segunda entrega y, cada vez más, teníamos patente la importancia de la factoría Harry Potter. Sin embargo, llegó la tercera entrega, Harry Potter y el Prisionero de Azkaban, donde una vez más acudí con mi sobrino mediano y,una vez más, la sala estaba a rebosar de niños. Pero esta vez fue diferente, notamos algo distinto, algo había cambiado, en la trama, en el color, en la presentación, una oscuridad, una maldad oculta. Recuerdo mirar a mi alrededor y darme cuenta que los peques ni respiraban, mi sobrino ya era mayorcito, pero el resto estaban... acojonados. Los mortífagos, los hombres lobo, las transformaciones, aquello ya iba en serio.
Cuando vi la cuarta ya no fui sólo con mi sobrino mediana y mi hermana, sino que nos acompañaba ya Marc, el más pequeñito de todos y que tenía edad para ver Harry Potter. Al no leer los libros no teníamos ni idea de qué iba a suceder así que estaba algo susceptible por si ocurría lo de la tercera. Pero no fue así, recuerdo pensar "es la mejor película de Harry Potter" cuando salí de la sala. A excepción de la muerte de Cedric, nos lo pasamos muy bien en el cine. A continuación vino la quinta entrega y, por extraño que parezca, me supo a poco. Fue entonces cuando empecé a fijarme en las críticas de los lectores y ví que todos se quejaban de la adaptación del libro a la gran pantalla. Ya no pude más y me los leí.
Los 7, de un tirón. Me leí la saga entera en menos de dos meses. Los que la conocéis ya sabéis que engahca, y de mala manera. ¿Y cómo es que me engancharon tanto a pesar de haber visto las películas y saber lo que sucedía? Sencillamente porque en las pelis no explican ni la misa la media. También es cierto que es imposible plasmarlo todo en dos horas y media (que ya son) de film, pero la verdad es que los libros fueron un lujo, una forma de matar el mono de Harry Potter de mala manera. Me volví fan del fenómeno, me compré una varita (y no me compré más porque son caras, pero todo llega jejeje) y fue cuando me dí cuenta de que las películas no estaban a la altura. Eran buenas y las había disfrutado pero había algo que no encajaba, y lo descubrí en la sexta, Harry Potter y el misterio del Príncipe. No voy a entrar en el tema de las adaptaciones de libros pero estaba clara una cosa, se habían salido del guión. La sexta película se centraba más en las andanzas adolescentes de los ya crecidos protagonistas que en la trama en sí, y lo quisieron justificiar diciendo que se tenía que mostrar que habían madurado y llegado a una época conflictiva... joder, si llevaban dándose de hostias contra el mal desde los 11, más conflictivo que eso ya me dirás tú.
Así que quedé decepcionado, decepcionado porque la historia, la verdadera historia de Harry Potter pasaba desapercibida desde la película número cuatro. Hasta que me enteré que J. K Rowling quería que la última fuera en dos partes. Aquí las teorías son muchas y diréis lo que queráis, que si el dinero que si tal, pero yo prefiero pensar que la mujer estaría harta de las adaptaciones (de hecho en una entrevista algo dijo al respecto) y dejó bien claro que quería que el final, el libro 7, fuese explicado todo todito. Y así llegamos a la séptima película, donde mucha gente se queja de que no pasa nada, y es porque no han leído el libro. Si lo hubiérais leído sabríais que pasa TODO, algun error, alguna omisión, pero poco más. Es una película preciosa, con escenas tan impactantes como el obliviate de Hermionne o el baile de ella con Harry, donde queda claro una cosa: son muy amigos, y nada más, pero muy amigos. Esa escena vale su peso en oro.
Y ese es el camino recorrido. Ahí van 10 años de mi vida siguiendo a Harry Potter, 10 años que terminan hoy, en la sala de cine número 3 del Maremagnum de Barcelona, a las 20 h de la tarde. Ya sé como termina, pero me da igual, los quiero ver, en carne y hueso, quiero esa batalla final, quiero ese sufrimiento, quiero esas desvelaciones, quiero toda esa magia delante de mi. Me hayan "decepcionado" o no algunas películas después de leer los libros, son 10 años cogiéndole cariño a unos personajes y, porqué no, a sus actores. Me va a dar penita cuando se enciendan las luces y, a pesar de que van a caer todas en DVD, hoy va a ser el último dia en que escuche en la sala de cine durante unos segundos del principio esa cancioncita característica mientras aparecen las letras características que dicen: HARRY POTTER y las reliquias de la muerte, segunda parte.
PD: Si algo aprendí viendo la primera arte de la séptima película en el IMAX de Barcelona es que hay que estar preparado, y llevar la varita ¿y vosotros? ¿llevaréis la vuestra? :D
¡Buen fin de semana a todos!
6 comentarios:
Yo también voy hoy a verla. Lástima que los del Imax no la hayan puesto como hicieron con la anterior.
P.D.: En el mundo de reboots, secuelas, precuelas y demás zarandajas espérate tú que no haya más Harry Potter en unos años.
Y yo también tengo ya las entradas compradas con un amigos, que me ha hecho verme en 2 días las 7 para ir hoy al cine... xD
Aún no sé si iré a verla hoy pero verla la veré ya que la septima es la película que más me gustó por su fidelidad, el resto... prefiero no hablar, los libros de Harry potter se leen en un suspiro pero tienen tramas y personajes para hacer una serie.
¡Por dios que alguien haga una serie de Harry Potter! ¡La BBC inglesa por ejemplo!
He salido del cine con un pequeño hueco en mi alma. QUe digan lo que digan del epílogo pasteloso, a mí me puede. BUenos amigos se van para siempre.
Adiós Harry, adiós Ron, adiós Hermione. Estarán siempre en mi corazón.
Buena reflexión acerca de la saga y lo que significa para los aficionados a las aventuras del joven mago, comparto muchos puntos como lector y posteriormente espectador.
¡Saludos!
Vista la última ahora ya sólo nos falta esperar que salga en dvd y nos haremos con ella. Después tocará pegaremos un maratoon de todas la pelis para volver a disfrutar de toda la historia contada a través de las películas ^^
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