Zombie Planet y Zombie Nation

Ya os dije que Zombie Island me había gustado puesto que trataba el tema de los muertos vivientes desde otra perspectiva y bastante original: la magia. Bien, pues la cosa no quedaba ahí ya que se trataba ni más ni menos que del comienzo de una trilogía compuesta por dos libros más Zombie Planet y Zombie Nation. Se leen en este orden: Island, Nation y Planet, ya sabéis, de menor a mayor geográficamente XD.

Zombie Nation es una "continuación" por decirlo de alguna manera de la primera. No aparece ningún personaje visto en Island pero la dinámica es la misma sólo que esta vez la epidemia se expande a lo largo de todo el planeta. Una joven es infectada y antes de morir entra a pedir ayuda en un bar de oxígeno de Los Ángeles. David Wellington ofrece un punto distinto en sus libros al crear la figura de los Lichs, aquellos muertos vivientes que conservan su inteligencia y sus recuerdos, pero que además tienen algún tipo de poder mágico. En esta trilogía todo aquel que es infectado pero que en el momento de morir sigue obteniendo oxígeno de forma artificial no se convierte en un muerto viviente descerebrado, y es lo que ocurre con la joven que entra en el bar de oxígeno. En un primer momento su primer poder es la invisibilidad, algo que le irá de maravilla al ser perseguida por Jack, un ranger del ejército de los Estados Unidos que intenta mantener a raya la epidemia.

La tercera parte, última y muy emocionante vuelve a traernos de vuelta a los protagonistas de Zombie Island. En esta ocasión será Sarah, la hija de Dekalb, quien llevará la batuta de toda la historia junto a Ayaan, su mentora. ¿El objetivo? Matar al Zarevich, un Lich ruso que ha reclutado a un ejército de Lichs con diversos poderes (entre ellos un hombre lobo, lo flipas) para dar con la Fuente de toda Vida y Muerte.

¿Lo bueno del libro? Al igual que el primero todo el elenco de personajes y originalidad con la que Wellington rodea la historia. Estos muertos vivientes no son a los que estamos acostumbrados pero no por ello dejan de ser menos interesantes. ¿Lo malo? La conexión entre libro y libro es pésima. A veces no sabes qué ha ocurrido y llegas a plantearte sériamente si te has equivocado en el orden entre el segundo y el tercero puesto que nombran cosas que no sabías que habían ocurrido y hasta cientos de páginas después no te las aclaran. Aparte de eso es una trilogía muy recomendable para todos los amantes de los zombies :)