Green Arrow/Black Canary, de vuelta al candelero

Cuando leí los primeros números de la serie, incluída la boda y toda esa porquería junta (porque no se le puede llamar de otra manera) comprobé como un guionista puede destruir todo el trabajo anterior en tan sólo dos números. Noñerías, cursiladas, argumentos sin importancia, basados más en una comedia romántica que en otra cosa, así me parecían. Todo lo que había ganado Green Arrow en este tiempo y lo que se había conseguido de Canario Negro en Aves de presa se iba al garete, así, sin más. Hasta que llegamos al tomito recopilatorio de Planeta y que comprende los números 15-22 de la serie.

Me ha gustado, no es que haya sido un Eisner pero es de esas lecturas amenas y bastante entretenidas, además con el aliciente de que no te puedes despegar de ellas hasta terminar. Para empezar, Andrew Kreisberg (el guionista, consigue tres cosas muy importantes: la primera es conseguir una trama interesante para los dos personajes, en ningún momento en detrimento del otro. Por otro lado se carga villanos de relleno y consigue crear dos nuevos bastante interesantes, Cupido es tan surrealista que consigue meter en verdaderos apuros (coñe, que casi lo mata) al propio Merlyn. Y por último conseguir lidiar con los dos apartados anteriores en una historia bien narrada y conjunta.

Era lo que yo quería, el Green Arrow de mal genio, inconformista y serio de siempre junto a una Canario Negro preocupada por su marido que desmuestra quien lleva los pantalones cuando de atrapar supervillanos se refiere. ¿De qué va la historia? Pues de como las cosas más simples se pueden torcer, de como GA salva a una mujer maltratada que, posteriormente, se convertirá en una especie de psicópata enamorada del arquero y de como Canario Negro, sin quererlo, deja sordo a un músico de los de toda la vida, imaginad el cabreo que pilla el tio. Eso sí, me encanta cuando violinistas inocentes son capaces de dominar la más alta tecnología XD, pero bueno, es un tebeo de superhéroes, no la líemos :)


No he leído el resto en inglés, así que le daremos una oportunidad porque en este tomito se la ha ganado. Eso sí, en cuanto al dibujo, hecho mucho de menos a Phil Hester, las cosas como son.