Se fue... y dejo un vacío en mi corazón

Este post incluye Spoilers sobre Ultimate Spiderman n.160

"Cuando estaba escribiendo el final de la historia, no podía ni ver el teclado. Estaba hecho polvo. Fui arriba, con mi esposa ella me preguntó qué me pasaba. Yo le dije que llevaba llorando los últimos cuarenta y cinco minutos, y que estaba agotado" Brian Michael Bendis.

Hace poco vi el video parodia sobre la muerte de Superman y tenían razón en una cosa: la muerte no existe en el universo de los superhéroes. Entonces ¿de qué sirve correr el riesgo? ¿cómo podemos poner al lector contra las cuerdas si no lo podemos impresionar con algo tan drástico como la muerte de un superhéroe? ¿Cómo puede el guionista hacernos sentir empatía por un hecho que, tarde o temprano, sabemos que va a tener arreglo? La respuesta es simple y llanamente que no pueden, y mucho menos en un número. Sin embargo, sí con 160 números a las espaldas.

Sabía que tenía que ocurrir porque lo habían anunciado, porque hoy en día es muy jodido y muy difícil escapar de los spoilers y, sobre todo, porque sentía en lo más hondo de mi ser que el título, esta vez sí, iba a ser muy acertado a pesar de su evidencia: Ultimate Spiderman, la muerte de Spiderman. Lo que no sabía era que me iba a calar tan hondo, algo que no me había ocurrido desde hacía 20 años, cuando cayó en mis manos la muerte de Supergirl en Crisis en Tierras Infinitas.

Daniel Mainé, sabiendo lo que me gusta Ultimate Spiderman me regaló ni más ni menos que el número original americano con la funda del logo de Spidey en rojo, y también recuerdo haberle dicho "gracias, pero voy a esperar a la edición española para leerlo". No se lo tomó a mal, ni mucho menos, simplemente comprendió que aún me quedaban 4 números y no quería saltarme el ritmo. Así que esperé, y cuando lo tuve en mis manos fue el infierno.

Cuando Spidey murió en la saga de El Otro, lo pasé algo mal pero me dió igual porque lo que iba a suceder se veía venir. Ahora bien, en el universo Ultimate no resucita nadie, almenos de momento. Pero todo eso es lo de menos, lo que si sabía es que el Ultimate Peter Parker llevaba siendo escrito desde hacía 160 números por el mismo autor y que ese autor ahora tenía que matarlo: no lo iba a hacer de cualquier manera, de eso estaba seguro, había mucho apego al personaje, no era el Peter Parker de Stan Lee, era SU Peter Parker, el Parker de Bendis. ¿Y cual es la diferencia? Que es un chaval de 15 años que lleva criando desde hace 10, aquello iba a ser como matar a tu hijo adoptivo. En el universo Ultimate Spiderman tiene 15 años, es un niño que lo único que ha conocido es el tormento por un tío fallecido, y amigos y familiares que sufren las consecuencias de su doble identidad pero que, pese a todo, han decidido arroparlo y protegerlo. En más de una ocasión tía May ha tenido que dejarlo ir pero esto, esto, me partió el corazón.


Recuerdo estar leyendo el número con una angustia permanente. Levantándome una y otra vez del sofá y dejando el tebeo encima de la mesa, tenía que pulsar al pause pero cuanto más le diera más se iba a retrasar. Sin embargo era inevitable, tarde o temprano tenía que sentarme y darle al play, con la incertidumbre de no saber cómo, con el desasosiego de los personajes y el temor a lo que estaba por llegar. Reiros de mí si queréis, pero nunca antes lo había pasado tan mal leyendo un tebeo. Las viñetas se hacían interminables, la lucha muy cruel y las opciones se le acababan al personaje. Finalmente sucedía, Spiderman, Peter Parker, moría delante de todo su vecindario y sus amigos en los brazos de la mujer que había sido una madre para él: tía May

"Lo he conseguido. ¿No lo ves? No pude salvarle. A tío Ben, no pude salvarle... no importa lo que hiciera. Pero te he salvado a tí... lo he conseguido". Peter Parker, 15 años.

Decir que estuve a punto de llorar es quedarse corto, ojalá hubiera sido todo eso. Hay mucha mierda por la que preocuparse en estos días, pero tengo todo el derecho del mundo a ponerme Que queréis que os diga, Ultimate Spiderman me parece uno de los mejores comics que se han escrito nunca. Me da igual lo que se hable de Bendis, pero ese autor ha mantenido cojonudamente una colección él solito durante años sin bajar el nivel (que se dice pronto) para, finalmente, dejarme con el corazón en un puño.

No sé como continuará ni lo que ocurrirá pero es así como mueren los héroes, es así como caen los superhéroes, es así como se escribe cuando la muerte es una incógnita, es así como se acerca un personaje al lector, es así ... cuando has hecho 160 veces bien tu trabajo.

PD: Ah, y me encantó que Bagley estuviera a los lápices, él nos lo dió, y él nos lo quitó.