Matt Smith y la carga de ser el undécimo Doctor (I)

Spoilers de la quinta y sexta temporadas.

Cuando Matt Smith fue escogido como el undécimo Doctor en enero de 2009 no se enfrentaba únicamente a la carga de representar a uno de los personajes más conocidos de la televisión mundial sino también al hecho de que, como mínimo, tendría que conseguir estar a la altura de su predecesor: David Tennant, quien en los últimos años había conseguido dejar el liston muy alto, hasta el punto de ser considerado el mejor Doctor de todos los tiempos junto a Tom Baker. Y es que no nos engañemos, una serie de Doctor Who en la que el Doctor no mola se va a pique fijo.

Sin embargo, Matt Smith no estaba solo, Steven Moffat (el productor entrante) iba a estar a su lado ya que iba a convertirse en el maestro pensante de Doctor Who, en el tirititero que movía todos los hilos. De modo que Moffat lo preparó todo, o mejor dicho, nos preparó a todos para la llegada del nuevo Doctor; si el Doctor iba a ser nuevo también lo iba a ser la Tardis, así que se encargó de destruirla y que fuera víctima de una "regeneración" en los primeros minutos de la quinta temporada. Al igual que algo tan característico como el destornillador sónico, que la propia nave se encargó de "regalarle" cuando el anterior se quemó en el incendio de la Tardis. Lo mismo sucedió con la banda sonora (Murray Gold merece todo los premios habidos y por haber al componer algo tan genial), sus aventuras, sus enemigos e incluso, y más importante de todo, sus acompañantes.

Steven Moffat procuró a Matt Smith una acompañante tanto o más carismática que él, Amy Pond, con una historia propia que se convertiría incluso en la parte central de la trama de la temporada. De ese modo, y sin olvidar a Catherine Tate o Billie Piper, teníamos una nueva "amiga" en nuestra pantalla que estaba a la altura de sus predecesoras, pero no iba a estar sola; Rory, su novio, pronto se convertiría en un personaje importante en la mitología del Doctor debido a que su relación con Amy, pasaría a la historia por ser uno de los ejes románticos más atractivos de Doctor Who desde que el Doctor se enamorase de Rose Tyler (Billie Piper). Por si fuera poco aún nos tenían deparada una sorpresa más, y eran las cada vez más numerosas apariciones de River Song, el único personaje que continuaba desde la época de Tennant.


Así pues, el primer episodio de la quinta temporada de Doctor Who es toda una declaración de intenciones por parte de Steven Moffat: Matt Smith lleva pajarita, tiene un nuevo destornillador sónico, está aquí para proteger el mundo y (quizá la revelación más importante) no le importa gritar a los cuatro vientos que él es el Doctor y que nadie puede con él, haciendo huir de esta manera a un grupo de policías espaciales que estaban a punto de destruir el planeta en busca de un fugitivo. Quizá la imagen más reveladora es la de Matt Smith atravesando las imágenes de los Doctores anteriores justo cuando aparece la de David Tennant. Es un duro momento para todos los fans de Tenant puesto que ator y productor nos dicen en ese "eh! abre los ojos! él es el Doctor! Tenant es uno más en la lista, como todos los anteriores". Duro, pero cierto.

En definitiva, tienes la sensación de que han pasado años entre una serie y otra y que han vuelto de nuevo con una nueva perspectiva para que tengas bien claro que hay que olvidar los viejos tiempos y abrazar al nuevo Doctor. Algo impresionante, teniendo en cuenta que se hizo para limpiar la inmensa energía y la herencia que había dejado Tennant, y sino recordemos cuantas series han perdido audiencia debido a la falta de un personaje principal por su muerte o retirada. En Doctor Who nunca antes había sido tan importante un casting.


Ahora bien, no tardaríamos en descubrir la grandeza de Matt Smith, un chico que no fue escogido al azar, sino más bien un actor bien preparado que superó el casting debido a rasgos físicos e interpretativos que le ayudaron a superar uno de los retos más importantes de la nueva etapa de Doctor Who: su...

Continuará mañana en la segunda parte de Matt Smith y la carga de ser el undécimo Doctor.