En mi calle hay un cruce

En mi calle hay un cruce. Es una calle medianamente normal, ni ancha ni estrecha, que se cruza con otra, también ni ancha ni extrecha. Es un cruce que pasaría totalmente desapercibido, no hay nada importante en él, está rodeado de los típicos edificios, los típicos coches aparcados hasta apurar la esquina e incluso algún que otro arbol colindante. Paso por él día sí, y día también, puesto que sólo hay un camino, sino quiero dar la vuelta a todo el barrio, para llegar hasta la parada del bus más cercana.


Pero no es un cruce normal. Desde hace un par de meses, sin embargo, viene sucediendo un extraño suceso que se repite casi a diario en formas diferentes. Caí en la cuenta una mañana en la que saqué a Noah a pasear. Curiosamente en el centro del cruce y de pie había una botella de cerveza. Una botella normal y corriente, no importa la marca, abierta eso sí y sin contenido alguno. Pero ahí estaba, la botella en medio del cruce. Así que me acerqué, la recogí y la deposité en el contenedor más cercano para evitar cualquier tipo de accidente estúpido. Este hecho me llevó a darme cuenta de que no era un cruce normal puesto que al día siguiente, casi a la misma hora había una naranja en lugar de una botella de cerveza.


Aquello me llamó la atención sobremanera. ¿Qué hacía en medio del cruce una naranja? Es más ¿qué hacía previamente una botella de cerveza en el mismo lugar? ¿Alguien había perdido por el camino las dos cosas durante dos días seguidos? Así que al día siguiente me asomé al balcón de casa, desde el cual puedes contemplar perfectamente el cruce, antes de sacar al perro y tuve que bajar a la calle porque no cabía del asombro. No era una cerveza, y tampoco una naranja, esta vez en medio del cruce había una montañita de arena. ¿Quien lleva encima arena? Nadie, almenos nadie que yo conozca.


Durante los días y semanas siguientes el hecho se sucedió en repetidas ocasiones: una lata, una pequeña pelota de tenis y alguna que otra vez se repitió el montoncito de arena, otras era irreconocible el objeto puesto que algún coche ya lo había chafado. Mi zona es muy tranquila así que me permitió observar de forma minuciosa todo el entorno del cruce. ¿Alguien me estaba gastanto una broma? La cosa no iba a quedar ahí, de modo que me dediqué a observar. En estos días de buen tiempo me apalanqué a ciertas horas a observar el cruce desde mi balcón mientras escuchaba música, leía o simplemente hacía compañía a mi perro.


Finalmente "el enigma del cruce" fue resuelto a las 11 en punto de la noche de ayer. Durante semanas habían aparecido todo tipo de objetos en el cruce, de forma casual, pero todos en el centro, ni un metro más ni un metro menos, así que el destino quiso que el dilema se resolviera también de esa manera. Estaba tendiendo la última tanda de lavadora cuando un sonido sordó me sobresaltó. Era el camión de la basura.


Seguramente ahora habéis eliminado teorías conspiradoras, bromas, e incluso abducciones extraterrestres. El puñetero camión de la basura se detiene justo un poco más adelante del centro del cruce para realizar sus tareas de recogida. ¿Y sabéis qué? Justo cuando cierran la puerta la esquina del vehículo tiene un hueco, un punto hueco y muerto por el que, cuando se mueve, algo cae. ¿Algo como qué? Algo como una botella de cerveza, una naranja e incluso a veces algo de tierra, ayer fue una botella de plástico.
PD1: este pequeño relato es totalmente verídico
PD2: buen fin de semana a todos :)

13 comentarios:

Carlos dijo...

Me ha molado la historia :D

Buen finde!!

Mikel87 dijo...

jaja. Muy divertida la anecdota, me tenias intrigado hasta el final.

Pater dijo...

bueno, yo la foto no la veo :P

pero me mola la historia... ay, un poco de fantasía basada en la realidad XD... molaría hacer una historia con lo que has contado, hombre!

saludos y buen finde^^

Ximi dijo...

No vemos la foto porque la esquina es una metáfora de nuestros corazones, y el camión de la basura es... No sé... ¿Una enfermedad venérea?

Detective Conner en acción!

Anónimo dijo...

Interesante anecdota =)

Paco Hernández dijo...

vale, borré la foto y qué jajajajaja

Angel "Verbal" Kint dijo...

OIga no se si le dije, ya que mi memoria está fatal, que el jueves puse su crítica de los puentes de madison....gracias por mandarmela.
saludos

Unknown dijo...

O_o!!

¡Estas hecho todo un detective!

Tu nunca te aburres ¿no? xD jejeje, feliz finde.

DANIEL MAINÉ dijo...

no si ya te veo en el balcon sentado con tu mecedora de madera y la escopeta de doble cañon, diciendote a ti mismo "soy el angel de la muerte, soy el angel de la muerte...."

Unknown dijo...

Jaja, muy bueno!! Si es que la vida cotidiana tiene estas pequeñas historias...

Paco Hernández dijo...

Angel- anda!!! O_O pues muchas gracias!! ;)

goku-nah, que va, me lo paso bomba XD

Daniel-jajajaajajajajaj, muy buena jajajaj

Merrick-como dicen, a veces la realidad supera la ficción

marguis dijo...

Me tenía intrigada, a ver si había un portal dimensional en el cruce o algo así!!!
Pero como decía Sherlock Holmes (y Spock) Descartando lo imposible, lo que queda, por improbable que sea, es lo que buscamos.

Un saludo!!

Maruja dijo...

Ahí queda demostrado como la navaja de Ockham tiene aplicación en las chorradillas de la vida cotidiana.

 


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